lunes, 5 de mayo de 2008

MANOS DE TOPO (LIVE)


El sábado pasado asistí al concierto que Manos de Topo dio dentro del festival Southpop de Sevilla y debo afirmar que mis expectativos se vieron plenamente confirmadas. Tenía curiosidad por ver qué tal se desenvolvía en directo esta banda barcelonesa cuya bizarrez vocal e instrumental me habían llamado la atención, sobre todo por el acertado empleo de ese sonido “fantasy” tan característico de los primeros teclados CASIO monofónicos destinados al consumo del hogar (como el VL-Tone o su versión mejorada, el PT1).

Lo primero que tengo que reconocer es que escuchar canciones de Manos de Topo durante mucho tiempo no me resulta excesivamente potable, sobre todo por el “efecto plañidera” que su cantante intenta mantener como signo de identidad y que eleva al cubo el lloriqueo vocal más exagerado de Robert Smith. Esta es la razón por la que no estoy por la labor de obsesionarme con su disco “Ortopedias Bonitas”, aunque el vídeoclip de “El Cartero” me parezca de lo mejor que se ha hecho en mucho tiempo en España y parte del extranjero.




Dicho esto, también hay que reconocer que una adecuada dosis de Manos de Topo nos hará disfrutar de una concepción pretendidamente grotesca de la puesta en escena y unas letras con cierto ingenio, cosa que se agradece en estos días de aburrimiento y estupidez conceptual sobre el escenario. No llegan al encanto del Niño Gusano, ya lo sé, pero a ratos (muy breves) me recuerdan a ese desaparecido grupo aragonés que no negaba la influencia de la discografía de los Hermanos Calatrava en su particular sonido marciano.


En cualquier caso, si usted es una de esos engendros cortavenas que, tras finalizar un concierto de Chico y Chica, suele pronunciar frases del tipo “menudo timo de concierto, lo llevan todo pregrabado” o “la instrumentación es muy pobre”, sin haber percibido que ha formado parte de una performance humorístico-musical, es mejor que se quede en casa y se olvide de Manos de Topo, porque van a tocarle el fistro y a base de bien. Si, por el contrario, tienen la paciencia de escucharlos durante quince o veinte minutitos para, a continuación, tomar algún bebestible y relajar su atención considerablemente, les aconsejo que no se los pierdan si pasan por su ciudad o comarca habitual. Y esto lo digo porque, aunque sigan sacando discos en los próximos años, la parte más histriónica del sonido actual del grupo está llamada a desaparecer en breve, principalmente por el hastío de sus propios miembros. De hecho, en el concierto del sábado el cantante relajaba (imagino que inconscientemente) su lloriqueo vocal conforme avanzaba el concierto y no es de extrañar que en el futuro lo modere cada vez más. Algo similar ocurrirá con el chico encargado de tocar el xilófono de juguete y el Casio (principal valor instrumental de la banda, como antes afirmé). En un momento dado, y por puro aburrimiento, querrá dejarse llevar por la polifonía y eso será el fin del PT1. Una lástima.

La Gloria de la Puerta Real

4 comentarios:

Anónimo dijo...

no los he escuchado nunca. pero el nombre ya me echa para atrás. y el nombre, diga lo que diga la shakespeare en sus sonetos, es lo más importante.

Anónimo dijo...

pues mira, a mí no me gustan nada...
esa voz me echa pa atrás...
ni con una sesión-terapia-tortura al estilo de la naranja mecánica acabarían entrandome...

Anónimo dijo...

Pues no diréis que el vídeo no es LO MÁS que se ha hecho en España en videoclips!

Anónimo dijo...

si quereis histrionismo visitadme

http://profile.myspace.com/index.cfm?fuseaction=user.viewprofile&friendID=174124036