lunes, 31 de marzo de 2008

SIN RIESGO NO HAY GLORIA




MOJAVE 3 – ASK ME TOMORROW

En 1996, tras 3 discos bajo el nombre de Slowdive, Neil Halstead, Rachel Goswell y Ian MacCutcheon deciden dar un giro de 180 grados, abandonar un nombre aclamado por crítica y público y comenzar una nueva carrera con Mojave 3. Qué les hizo dar este cambio inesperado solo ellos lo saben, pero pocos grupos se arriesgan a dejar un tren lanzado y coger otro que no saben dónde les llevará. Según ellos 3 discos fueron suficientes para sus aventuras sónicas y espaciales. De esta guisa abandonan Creation y fichan por 4AD editando el LP Ask Me Tomorrow.

Supongo que debió ser un shock para aquellos fans shoegazers ver como unos de los estandartes del movimiento decidían abandonar delays, reverbs y demás capas sonoras para aparecer bajo un estilo cercano al country y al folk americano, elegir el nombre de un desierto americano lo dice todo. Canciones basadas en guitarras acústicas, arpegios mínimos, pedal-steel, pianos desnudos, Mojave 3 decidían mirar al horizonte americano, a paisajes enormes, al gran espacio vacío de la tierra desierta. Y en este sentido quizás no se separaban tanto de Slowdive, al menos de su parte más sencilla y ambiental, pues este disco recoge ambientes llenos de melancolía, no expresados bajo capas de distorsión, si no con el silencio entre acordes y la delicadeza de un pedal-steel, con la voz melódica de Rachel o el sencillo arreglo de un piano. Aunque quedaba sitio aún para una última explosión de ruido en la canción que cierra el disco, Mercy.


Lo que hace para mí especial este disco es la fuerza oscura que contiene, como si hubiera algo dentro que tirara hacia la etapa anterior del trio y otro algo que mirara adelante. Mantiene esa atmósfera agobiante que destila el primer disco de Slowdive pero vista desde una perspectiva y un estilo acústico más americano que inglés. Los siguientes discos de Mojave 3 ofrecen ya una luminosidad que solo se intuye en canciones como Lovesongs on the Radio o Tomorrow’s Taken. Por eso se trata de un disco especial, con una sensibilidad muy particular.


Santeuil

jueves, 27 de marzo de 2008

Levántate y salta!


The Rumble Stripes - Girls and Weather

Cuando he leído y escuchado muchos comentarios, críticas, biografías y demás sobre un grupo nuevo o un nuevo lanzamiento discográfico, me cuesta muchísimo escribir sobre él. Me pasa, no sé si es común y por eso al final los discursos terminan repitiendo los mismo patrones, que asumo esos patrones como reales sin más, porque es obvio, porque está claro, porque todos lo dicen. Me pasa esto, en parte también, porque tal vez no he tenido tiempo de digerir lo verdaderamente importante, la música. No he tenido tiempo de asimilarlo, de hacerlo mio, de añadir a esos patrones los míos propios, mi propio bagaje. Es por esto que me siento más cómoda hablando de discos que ya llevo unos meses escuchando, porque ya puedo aportar algo mío, propio, más allá de lo que todos digan.


Suelto todo esto justo antes de hablar de un disco que vengo escuchando desde hace unos días pero del que antes había leído y releído sus comentarios, críticas y biografías. O sea, en contra de lo que acabo de escribir. Pero una es valiente y la música de The Rumble Stripes me levanta el ánimo lo suficiente, como para querer dedicarles mi post semanal. Se han sacado de la manga un álbum de debut que está entre Pinto y Valdemoro, que ni fú ni fá, ni chica ni limoná... A ver, voy a intentar explicarlo de una manera más concreta. Que por un lado hacen música inspirada en grandes bandas de los ochenta y son indiscutibles las manidas referencias a gente como Dexy Midnight Runners o Specials. Pero por otro lado, no se alejan del todo de sus contemporáneos para no quedarse fuera de los circuitos oficiales (prensa, festivales, etc). Vaya que ellos dicen que hacen lo justo para llegar a los que quieren más de lo mismo pero si te atreves a escucharles con más atención tienen para tí un puñado de canciones llenas de energía que te harán sonreir. Ideal para escuchar después de una estresante jornada laboral.


miércoles, 26 de marzo de 2008

McSEAL



Seal - The Right Life

Este es el segundo single de su último disco (System) y, al igual que el resto de las canciones del álbum, no ha resistido nada bien el paso del tiempo (a pesar de que el single salió hace cosa de 2 semanas). El problema es que si lo escuchas por primera vez puede parecer hasta interesante; De hecho, está terminada de una forma muy convincente y da la impresión de que cuantas más veces la escuches, más te va a gustar. Pero no: Cuanto más la escuchas, más te das cuenta de lo poco que esconde. Es lo mismo que pasa con (por poner un ejemplo) Moby. Ambos cantantes son líos para una noche; No para nada largo ni estable.
Alguien en el Rock De Luxe definió una vez a los Pet Shop Boys como EL ARTE DE LA FALSA BANALIDAD, una definición que me pareció de lo más acertada. Pues Seal y Moby representan la banalidad más absoluta. Son fast food musical. De todos modos, en la última hamburguesa musical que nos ha cocinado el británico (y al que puso un título muy pet shop boys: System), se esconde una gema cantada a duo con su señora, la modelo Heidi Klum (que, por cierto, sorprende con una voz de lo más decente). La canción se titula Wedding Day y es tan chula que hasta se le perdona esa cursilería de letra (de hecho, la combinación del título con el hecho de que la cante con su esposa ya prometía lo peor). Este debería haber sido su segundo single y no el olvidable Right Life.
Por cierto, que la canción de la boda me recuerda a una maravilla de David Bowie (del disco Black Tie White Nose) titulada The Wedding Song. Aquí también Bowie cantaba a los 4 vientos lo eufórico que estaba de haberse desposado con el amor de su vida (otra modelo: Imán), y además (al igual que Seal) también hacía referencia en la letra a angelitos y a cosas celestiales (debe ser una cosa muy británica). De todos modos, esta canción de Bowie es un gigante al que Seal jamás podrá mirar cara a cara. Pondría por aquí un enlace de esa obra de arte (la de The Wedding Song), pero inexplicablemente nadie lo ha subido todavía a Youtube.


- Por José Manuel Pozo


El single que nunca debió ser: RIGHT LIFE

Y el que sí: WEDDING DAY

martes, 25 de marzo de 2008

SE BUSCA DISCO PREFERIDO

Me está costando mucho encontrar un disco que me guste mucho, de esos que llevas todo el día escuchando en el ipod, no doy con él. Así que mientas llega hago unas reseñas breves a un par de canciones y un par de discos que no pasarán a ser de mis super favoritos, pero que algo tienen:


Kleerup feat. Titiyo - Longing for lullabies

Ya he hablado en otra ocasión de este Kleerup, y sí, es el amiguete de Robyn en Every Heartbeat. Esta vez intenta repetir los aciertos de su megasingle con Robyn, se copia a sí mismo descaradamente y sobre todo al Moonlight Shadow del Oldfield, del que las reminiscencias son más que evidentes. No es un temazo como su predecesor, pero mira, a mi me recuerda a esas canciones pop chulas de la radio fórmula con la que crecí, muy comerciales pero con cierta calidad y buen gusto (prefiero mil veces esto que nuestros subproductos españoles)
Por cierto, la que canta no es una prima lejana de Cher, es Titiyo la prima de la desaparecida en combate Neneh Cherry.




Styrofoam - After sunset


El que hasta ahora publicaba su pop electrónico experimental en el sello berlinés Morr Music, tiene ya preparado su nuevo disco para el que será ahora su nuevo sello: Nettwerk. After Sunset el single de presentación de A Thousand Words, que esta vez promete ser lo más luminoso, pop y accesible que ha hecho nunca. Yo, que no le hago ascos a una buena canción pop, no puedo parar de escuchar este semi hit que bien podría ser un buen sustituto de los definitivamente muertos Postal Service.

Descárgala gratis en su myspace:
http://www.myspace.com/styrofoam



Bobby & Blumm - Everybody Loves

Él es F.S.Blumm, conocido por su vinculación al sello Morr Music (otra vez), Tomlab o Staubgold. Ella es Ellinor Blixt, sueca y con experiencia musical en diversos grupos. Los presenta Thomas Morr y deciden hacer música juntos. Y viendo los derroteros que está tomando en los ultimos tiempos el sello de Thomas, no hacen electrónica, nada de electrónica. Bobby & Blumm hacen canciones delicadas, acústicas, con algúnos detallitos chulos, y sobre todo con la presencia de la frágil voz de la muchacha y de algunos coros del propio Blumm. Entre los discos que les han influenciado para su proyecto destacan Nico "Chelsea Girl" o Juana Molina "Tres Cosas", así que te haces una idea. El disco es muy bonito, lo recomiendo sobre todo para ponerlo de fondo mientras lees un libro y tomas una taza humeante de te.

http://www.myspace.com/bobbyandblumm


Lullatone - the bedtime beat

Llegué a este grupo de casualidad, me gustaron los diseños de sus portadas y decidí escucharlos. Son japoneses (con un americano en la formación) y hacen un tipo de pop mínimo, dulce, bizarro e imaginativo, que lo mismo crea unos ritmos con un chapoteao de agua, que con unos ronquidos, que te tocan un xilófono, o una botella de anís. Yo me apunto en un cuadernito su nombre, y me guardo alguna de sus canciones para pincharlas en una fiesta al atardecer en ese justo momento donde los invitados comienzan una batalla de osos de peluche.

Lullatone -


http://www.myspace.com/lullatone


Davis


domingo, 23 de marzo de 2008

LA BATALLA MÁS DIFÍCIL


Standstill. Vivalaguerra

Es estupendo que mis tres próximas críticas estén dirigidas a la música nacional, un territorio en el que (con pequeñas excepciones) yo no me movía con comodidad. Y es que es difícil, si no te gustan Los Planetas ni Maga, encontrar algo en el panorama actual que no suene a estas dos formaciones. Por eso, cuando fui al concierto de Standstill el pasado Febrero, este grupo con diez años de existencia pero totalmente nuevo para mí me dejó boquiabierta desde el mismo momento en que empezaron a cantar. ¡Aquello no sonaba a las voces detestables de Los Planetas y Maga!

Así empezó mi proceso de abducción: las voces directas, hirientes, polifónicas, que a veces me recordaban a la seca pureza de un cantautor, otras veces al hardcore del que proviene la banda, pero que principalmente me dejaban sin referencia más allá de lo que estaba escuchando: voces absolutamente personales, vírgenes y capaces de achicarse hasta el lamento más delicado y sensible para, acto seguido y sin transición, aullar de dolor y sonar rabiosas y reivindicativas. Esto en cuanto a la voz; la música que la acompañaba me dejaba igualmente estupefacta: ¿a qué sonaba aquello? Una vez más me quedaba sin otra cosa más que vagas referencias: del indie más frágil al metal más potente. Y, lo que es más, la formación presentaba, no sólo voces y música inauditas, sino letras trabajadas, agudas como cuchillos, desoladas o cargadas de energía, letras que, al escuchar detenidamente su último disco (Vivalaguerra), descubrí redundantes dentro del álbum, apareciendo reiteradamente en distintas canciones, unidas por esas frases y conformando un disco redondo en todos los sentidos, cruzado por un hilo común tanto lírico como musical. ¿Cuál es, pues, ese centro corazón cordón umbilical del que parte el territorio venoso unas veces desaforado y doloroso, otras vibrante de alegría, cargado además de un sentido de la ironía feroz o refrescante, según el momento, que recorre todo ese organismo único que es este Vivalaguerra?

Yo diría que en el propio título del disco está la respuesta: Standstill siguen tan combativos como en sus inicios (“Progress Self-destruction”, 1996; “The Tide”, 1997; “The Ionic Spell”, 2001, mejor disco del año según las publicaciones Mondo Sonoro y Rock Sound; “Memories Collector”, 2002, también considerado disco del año, “Standstill”, 2004) pero ya entonces reivindicaban para sí salir de la etiqueta del hardcore y poner un nombre propio a su criatura musical. Hacemos “emocore”, decían, y no hacía falta que dijesen nada: allí estaba esa mezcla de música “gritante” con delicadas emociones súbitas, allí esa explosiva combinación de euforia y recogimiento, rebeldía y dulce lamento, subidas y bajadas de intensidad, emocional y emocionante: como un electrocardiograma febril y arrítmico, como un corazón que, fuera de modas, estuviese realmente vivo.

Ahora, en su último disco, valiente desde su nacimiento, pues está autoeditado, esta montaña rusa que es la vida con su rutina cotidiana (“platos, cucharas…la mañana ya llegó, hoy puede ser un gran día”, reza una de sus canciones), aparece como el único monstruo al que retar, la única epifanía a la que amar. La batalla, pues, se ha ido volviendo íntima y se ha vestido de diario, el idioma mismo se ha acercado al hogar (dejan de cantar en inglés y nos hablan en un castellano familiar y directo).
El combate que es, pues, “Vivalaguerra” resulta cada vez más claro, más cercano, más crudo y real, a la vez que humilde: no es otro que el de despertarse por la mañana inaugurando un nuevo día imperfecto. No suenan cornetas ni se hinchan banderas. Pero la batalla está ahí: “que silben los champús, que salten las tostadas…requemadas, repiquen las ventanas…mal cerradas, ondeen… nuestras sábanas, también manchadas”. El poder máximo que se puede gritar en este patio de vecinos es “Yo soy el presidente de la escalera”, y el “ciudadano” de este disco, como mucho, puede salir “como un rey…a su terraza”. El soldado de Standstill mira al suelo y su contrincante al cielo (“vaya duelo”, dicen irónicamente) y el frente está en la propia mañana construida a diario y envuelta, tras las paredes, de “aire” (otro elemento reiterativo, esta vez liberador, en el disco). La vida irrumpe en cualquier momento de la forma más inadecuada y tempestuosa (“Romper un silencio así no tiene perdón” es, además del lema que corean los fans de Standstill, parte de la canción titulada “¿Por qué me llamas a estas horas?”, algo que todos tenemos que reprocharle a la vida cada mañana). El tono del disco es imperativo y nos pide no volver los ojos a la realidad a veces dura con lo que más queremos (“Mira a mamá sin suerte”, repite la segunda canción del álbum), pero ante esta única vida que tenemos hemos de permanecer de pie todavía, como el mismo nombre del grupo pide, como ellos en estos diez años de música que pelea en la más difícil y más hermosa guerra: la de nuestro día a día.

Escuchando este magnífico LP y estando dentro de la misma batalla que ellos sólo podemos acabar pidiendo que ésta que nos da de llorar y reír no acabe nunca. Así pues, permanezcamos erguidos (soldaditos en formación) y sigamos gritando: ¡VIVA LA GUERRA!
Por Inesa/Azúltima

viernes, 21 de marzo de 2008

Murder on the dancefloor


Hercules and love affair - Hercules and love affair

La música de baile está muy viva últimamente. La electrónica ha sido el género de nuestra generación, eso está claro. Los djs se han convertido en cabezas de cartel de festivales, se han convertido en los productores que han lanzado jitazos por doquier, se han convertido en los auténticos termómetros de las tendencias. Todo era nuevo y excitante. Pero con el paso del tiempo todo se convierte en cíclico y la electrónica está ya viviendo sus propios revivals. Ahora vuelve a ser importante hacerte bailar y sonreir. Ya hemos superado la etapa de narcisismo del jander por el jander sin más propósito que demostrar quién es el más jander de todos. Ahora los fenómenos de música electrónica que están de moda, los que llegan a más gente y más rápido, son los que muestran sin complejos que se puede mover el esqueleto haciendo música como se lleva haciendo toda la vida. Sí señor, el pop al servicio de la pista de baile. Porque es el pop lo que nos hace universales, y lo que, en mi humilde criterio, hace que podamos pasarlo igual de bien con Hot Chip que con Kylie Minogue (que se ha sacado de la manga un par de singles, oigan, que no tienen desperdicio). Oye, que bailar es muy, pero que muy sano.

Vamos a lo que vamos, que llevo mucho tiempo sin escribir y se me acumulan las ideas. Y en esta tarde de recogimiento y sentimiento cofrade yo de lo que quería hablar es del nuevo pelotazo para las pistas de baile, el disco de debut de Hercules and Love Affair. El homónimo trabajo del grupo no es más que la materialización del proyecto de Andrew Butler, (sí, DJ) que ha puesto en la coctelera de su ordenador, o su mesa de mezcla, o lo que quiera que use para hacer canciones, ingredientes de todas las épocas doradas de la música de baile. No sólo de los ochenta, que es el revival vigente, (con sus pequeños momentos a medio camino entre el jazz y el post-industrialismo de Iris, por ejemplo), sino de la música disco, el sexy y bailable funk setentero (Hercules' theme, segundo y contagiosamente bailable segundo corte del álbum. Y house, y tecno del de toda la vida. Y mucho mucho más. La mezcla, no me negareis, resulta, cuanto menos interesante. Y eso que todavía no he hablado de Antony... Antony Hegarty... Sí, el de “yo y los Johnsons”, que está ahí en plena pugna con Timbaland a ver si es el fenómeno musical que más colaboraciones aglutina (aunque creo que no va ganando). La cuestión es que a mi Antoñito me gana con lo que haga, para qué nos vamos a engañar. Sin llegar a volverme loca consigue que le preste la suficiente atención como para reconocer que es una de las figuras más relevantes en el panorama musical en lo que llevamos de década. Y sí, hay que reconocer que cuando aparece poniendo voz a algunos temas del discos, éstos se convierten, de manera automática, en los más destacados. Desde el contundente primer single Blind, a mis dos favoritas, Raise me up (que hace eso, levantarte cuando ya te estabas aburriendo), y Time Will, el tema encargado de abrir el disco. Yo os propongo un escucha sin complejos, como se muestran los participantes en este proyecto, porque bien merece más de una oportunidad. Es cierto que después irá perdiendo fuelle y nos quedaremos con Blind y un par de temas más que esperar poder bailar cada fin de semana.

por Rose

http://www.youtube.com/watch?v=gMZ4F0YirL4 http://www.youtube.com/watch?v=Fb8S51M2GAc http://www.myspace.com/herculesandloveaffair

jueves, 20 de marzo de 2008

La vida es sueño



Pluramon - The monstruous surplus

¿Qué tienen en común Cocteau Twins y My Bloody Valentine? Vale, es una trampa, porque debería haberte preguntado por el nexo entre Angelo Badalamenti y Marcus Schmickler, pero a este alemán no lo conoce (casi) nadie. Y la respuesta sería Julee Cruise, esa voz que suele salir de no-se-sabe-bien-dónde en temas como Falling (Twin Peaks) o Border, una de las últimas baladas que me tienen enganchado en el último trabajo de Pluramon.

Es cierto que una escucha de este The monstruous surplus te sonará a un millón de cosas, a los ya mencionado o a Slowdive, a Ride y a toda esa gente que hace paisajes sonoros y lo mismo te dejan estacado por la emoción que, dependiendo de tus gustos, te empachan más que una novela de Antonio Gala.

Entre el dream pop de mediados de los noventa y el shoegazing de unos cuantos años antes, The monstruous surplus no adolece de autocomplacencia. Es algo así como un chaparrón eléctrico y digital, la mayoría de las veces noise y onírico, otras psicodélico (Fresh aufhebung), que sigue la estela del anterior trabajo de Pluramon, Dreams top rock (2003). Marcus ha querido contar para esta ocasión con un trío de jotas en la parte vocal: la escritora alemana Jutta Koether, la indie-soul berlinesa Julia Hummer (autora de God, you’re so beautiful!) y la musa Cruise, que lleva años participando en las giras del grupo. Advertencia: si no tienes el disco con los créditos, puede que te cueste diferenciarlas.

Por Manolo Lay

Pluramon con Julee Cruise en la sala Apolo (17 de febrero de 2008)

miércoles, 19 de marzo de 2008

En boca de Tracey Thorn




Hoy Tracey canta para mi:


Smokes & Mirrors (versión de Magnetic Fields)




King's Cross (versión de Pet Shop Boys)



Time After Time (versión de Cyndi Lauper)



Over the Rainbow (de la película El Mago de Oz)


martes, 18 de marzo de 2008

UNA RACIÓN DE POP



THE SOUND OF ARROWS


Son el nuevo fichaje de Labrador y se presentan con un single que a mi me encanta, Danger! En su myspace tienen remezcla del tema y una bonita cara B, y yo les voy a seguir la pista.

http://www.myspace.com/thesoundofarrows



KYLIE Y EL PP

Youtube es el fenómeno más importante en internet sí o sí, yo ya no sabría qué hacer sin el. En esta ocasión nuestra pizpireta Kylie les canta una canción a los dirigentes del PP en La Noche de Hermida. Atentos a los saltitos iniciales de la muchacha y a las caritas Aznar, Rajoy, etc... Propongo que esto se convierta en algo habitual en futuros debates televisivos políticos, que podrán verse amenizados con actuaciones musicales de Robyn, Roisin Murphy o Alizeé.





GOLDFRAPP YA NO BAILAN

Pues se ve que Alison encargó un remix de su nuevo single Happiness a Rex The Dog pero que no le gustó nada, ya que no quieren sonar electrónicos ni bailables. Una pena porque este tema es para bailarlo un par de veces. Los encargados del mix lo cuelgan en youtube acompañado de un video casero y se ríen un poco:





ANDORRA QUÉ HERMOSA ERES

Tras el despropósito de la representación eurovisiva de España algunos habíamos puesto todas nuestras esperanzas en Gisela, que representa ni más ni menos a Andorra. Pues vayanse olvidando, porque la canción es un churro manufacturado que lo mismo puede ser del 2000, que del 2002, que de un anuncio de cervezas o de una entidad bancaria.


lunes, 17 de marzo de 2008

JUVENTUD, DIVINO TESORO




MGMT - oracular spectacular


Últimamente no dejo de escuchar dos temazos geniales de este grupo neoyorkino, que ha sacado recientemente (creo) su disco de debut Oracular Spectacular. 'Kids' y 'Time to Pretend', dos hitazos en toda regla, dos temas sencillos, directos, llenos de esa frescura que tienen los noveles tan difícil de igualar por los viejunos como nosotros. Según dijo mi hermano, parecen una mezcla entre Ladytron y Mercury Rev, aunque creo que esa comparación les viene algo grande. Yo añadiría algo parecido también a Hot Chip en ese uso de la electrónica adecuada al pop, un poco de electro y mucha energía. En fin, dos temas que se encuentran ya entre lo mejor del año y que no pararé de disfrutar hasta dentro de varios meses, y que por supuesto os pediré sin ningún tipo de remordimiento a esos mantas que pincháis en fiestas para barbudas.


La sorpresa llega cuando escuchas el resto del disco. Si me pusieran uno de los temas anteriores con otra canción del disco si saber quien toca jamás adivinaría que son el mismo grupo. En ellas se aprecia una gran influencia de ese David Bowie de finales de los sesenta, principios de setenta, en temas como 'Weekend Wars'. También mucha psicodelia setentera como en 'The Handshake' o '4th dimensional' transition. El tema 'Electric Feel', de lo mejor junto a los dos hits de los que hablamos antes, sigue esa estela de canciones en falsete a lo Scissor Sisters, aunque con un toque mucho más retro muy de los 70. No todo el disco es electrónico, se mezclan mucho con guitarras, e incluso algún tema acústico que puede recordar a los inicios del brit-pop. Lo que impregna más a todo este disco es esa psicodelia setentera, quizás un poco de glam, y un barroquismo musical que parece estar ganando terreno últimamente en grupos como Panda Bear, Efterklang, y algunos trazos de Caribou.


Quizás lo peor que nos encontramos es ese exceso de eclecticismo, de diferencias grandes entre las canciones, por que como dije antes, kids y time to pretend resaltan en el disco tanto por la calidad como por su sonido más actual, más americano. No es que el resto de canciones sean mucho peores, pero no están al nivel y decepcionan bastante tras las expectativas creadas por los dos megahitazos. Un beso.

Discográfica: Columbia, 2007


santeuil

LA CASA AZUL EN SEVILLA

Despues de pasar por algún que otro momento de incertidumbre sobre su continuidad, ya se ha publicado el cartel completo del South Pop 2008. Esta vez el festival tendrá lugar en el Centro Andaluz de Arte contempopraneo, y para mi lo más importante es la inclusión de La Casa Azul. Aquí el resto de grupos (muy muy interesantes):


Jueves 1 de mayo

José González
A Hawk and a Hacksaw
Pauline en la playa
Limousine
Friska Viljor
Souvenir


Viernes 2 de mayo

Barry Adamson
Mobiil
El Guincho
Grande-Marlaska
Nisei
Pumuky


Sábado 3 de mayo

La Casa Azul
High Llamas
Centenaire
Novö
Soy Un Caballo
Manos de Topo



NUEVO VIDEOCLIP DE HIDROGENESSE

Ahora que tienen recien estrenado BESTIOLA, su mágnifico cd de rarezas y revisiones, podemos ver el maravilloso video de Fuig llop fuig llop fuig:

martes, 11 de marzo de 2008

MÚSICA PARA UNA MANTIS RELIGIOSA



Alexandre Desplat, Lust Caution Soundtrack

Alexandre Desplat es un compositor francés del que yo recuerdo, al menos, dos joyas absolutas: las bandas sonoras de El velo pintado y Birth. De hecho, yo me enamoré de Desplat viendo la de Birth, una película que arrancaba como un episodio de Dos metros bajo tierra (O sea, con una muerte inesperada). La música que acompañaba ese paso a la otra vida era lo más emocionante que había escuchado en mucho tiempo. Rápidamente me quedé con el nombre, pero no volví a encontrármelo hasta que vi El velo pintado, otra joya de Desplat plagada de partes impresionantes como correazos. Y con correazos ha vuelto en Deseo Peligro (y digo lo de los correazos por cierta escena de la última peli de Ang Lee).

Entre sus vírgenes, Desplat ha situado en más de una entrevista a Williams, Thomas Newman, Zimmer o Newton Howard. Y efectivamente ha absorvido las influencias de estos cual si fuera un pararrayos y los ha proyectados sobre sus propias creaciones, reinterpretándolos y rociándolos de toques originales, pero sin disimular ninguna influencia (y no sólo la de estos, sino la de tantas otras bandas sonoras americanas clásicas con las que probablemente ha crecido). En esto se aparta completamente de mis tres compositores favoritos: Badalamenti, Glass y, sobre todo, Nyman. Al contrario que ellos, no parte de una base muy personal y reconocible que adapta luego a las películas, sino que agarra lo del vecino y lo adapta a sí mismo. Dicho así parece que lo estoy poniendo a caer de un burro. Pero para nada.

La BSO de Lust (que sin ser tan buena como la de Birth o la del Velo pintado, merece ser escuchada independientemente de la peli) es, al igual que la cinta, sexy y oscura, pasando por todas las fases (a cual más tensa) que va recorriendo la confundida protagonista de la historia. El álbum contiene mucho lamento de violín y mucha música de suspense; Todo muy típico, muy visto, pero igualmente hechizante.

Punto aparte merece la película en sí, estrenada el pasado diciembre. El reputado Ang Lee ha vuelto a rodar Brokeback Mountain pero utilizando chinos en lugar de cowboys, y el resultado es igualmente espectacular (Si no mejor aún). El subtítulo de la película podría haber sido el mismo que aquella famosa peli de Demi Moore (Disclosure): SEXO ES PODER. Es con sexo como la mantis religiosa de la peli se acerca a su víctima y es con sexo como la víctima va escalando posiciones. Y cuando este sexo viene ilustrado con la inquietante música de Desplat, rápidamente intuímos de que el sexo no es sólo poder sino también una guillotina por la que rodarán cabezas.

- Por José Manuel Pozo


Lo peor: El corte número 4 (el único que no está escrito por Desplat): Intermezzo in a Major de Brahms. Una pieza romántica que sirve de contrapunto al resto del disco.

LA LA LAA LAAAA

LA CASA AZUL NO NOS REPRESENTA EN EUROVISIÓN

Sobre este tema ya está todo dicho, La Casa Azul quedó tercero en la selección del candidato a Eurovisión y el clamor popular hizo ganador a un tan Rodolfo Chili no se que, que representa todo lo que aborrezco de esta Espagna tan, tan… pues eso.

Lo mejor: la actuación de Guille (pese a estar afónico) actuando en TVE en prime time. Y que ahora estoy deseando volver a verlo en directo.
Lo peor: he oído que Manolo de Astrud iba a hacer los coros pero no pudo porque tenía que estar en una mesa electoral, hubiese sido un momentazo.



SEBASTIAN TELLIER CON UN DAFT PUNK A BELGRADO

Sigo con el concursito… No se como ha elegido Francia a su representante, pero lleva a Sebastián Tellier con uno de los temas del disco que ha hecho con la mitad de Daft Punk. La canción es chulita, y aunque no me mata tiene su aquel. Es elegantona, pop y cantada en inglés. Una apuesta con calidad.



MEDIO VIDEOCLIP MAGISTRAL

No se muy bien quien es esta muchacha (Santogold), y la canción se deja escuchar. Lo que me interesa es el video, bueno medio video. En la primera mitad la cantante se la pasa montada en un caballo en el bosque de Twin Peaks con dos bailarinas que animan el cotarro. Para mi lo mejor empieza en el minuto 1:16. Gore de colores, una idea simple pero muy bien aprovechada. Un medio video genial.



GOLDFRAPP IGNORADOS

¿Es una impresión mía o todo el mundo está poniendo a caldo el nuevo disco de Goldfrapp? Eso de desintoxicarse pasando a ritmos más relajados y dejar la discoteca a un lado puede traer malas consecuencias. A mi el disco me sigue pareciendo fantástico, y el primer single A&E un clásico instantáneo de los que te ponen la piel de gallina. Aquí interpretan en directo las dos mejores canciones del disco (A&E y Caravan Girl):



NUEVO GRUPO CHULO: THE AIRDFIELDS

Y hoy que estoy malito con faringitis recomiendo descubrir al mismo tiempo que yo a este grupo de sonido clásico indie pop que me está gustando mucho. The Airfields, muy sarah records style:


lunes, 10 de marzo de 2008

LOS CHICOS INTELECTUALES



TINDERSTICKS II


1995, el final de la época dorada de la música ‘indie’. Todo se ha inventado ya. Solo queda que la electrónica se repita hasta la saciedad y que cada grupo nuevo ‘suene a…’. Por supuesto que aparecerán geniales bandas, pero ya nada será lo mismo. Claro esta que en ese año no sabíamos nada de todo esto. Y entre los albores tardíos del post-rock, los acordes fáciles y el glamour(¿?) del brit-pop, el ocaso del shoegaze (del bueno, no lo de ahora), la guerra Blur-Oasis, el fracaso del grunge y los éxitos en la pista de baile aparece el segundo álbum, sin título, de una banda llamada Tindersticks: un violinista sin formación académica capaz de dirigir una banda de cuerda para hacer los arreglos, un guitarrista sin afán de protagonismo que toca la clásica sin correa, un batería con cara de no haber roto un plato, un teclista y un bajista que se deslizan por las canciones llevándote con ellos sin que te des cuenta y el cantante de la voz grave, suave, imposible, que te mece en tu sillón imaginario (por que tindersticks se escucha sentado en tu sillón, ese que prefieres para escuchar tu música). Esta panda de chavales editó este año uno de los últimos grandes discos de esa época dorada, la que va desde el 85 al 95, y sin duda uno de los mejores e imprescindibles de los 90.


No voy a hablar de influencias por que no tengo ni idea de qué influencias tienen, ni me importan, os digo que es uno de los grupos más personales que puedes escuchar. Se podría decir que hacen una música bastante clásica, ya que se conduce mayormente por un piano, bajo y violines, sin distorsiones, guitarras en segundo plano, a pesar de ‘el diablo en el ojo’, el primer corte, donde encontramos uno de los mejores inicios de disco a través de esas disonancias que comienzan a envolverte poco a poco hasta meterte en el disco. Eston chicos destilan sobre todo austeridad y elegancia en cada canción. Temas orquestados a la perfección, que en alguna ocasión estallan en forma de trompetas y violines. Despues te sorprenden con un tema guiado tan solo por un bajo y un teclado, como su tema más conocido ‘no more affairs’. Pero sin duda el aspecto más característico es la increíble voz de Stuart Staples, sus melodías fuera de la escala posible para el humano, una voz deudora quizás del mejor Leonard Cohen. Una voz que narra a la perfección las historias más cercanas a la literatura inglesa que al mundo de la música. Tindersticks II, así se butizó el álbum, es un disco invernal, suena a ver nevar y a melancolía, a whisky añejo, a la barra de un café de madera y un cigarrillo humeando a contra luz.


santeuil



Lo mejor: el dueto con Carla Torgesson, de los Walkabouts en 'travelling light', un temazo donde se compenetran a la perfección.

Lo peor: quizás un exceso de duración



viernes, 7 de marzo de 2008

Es el indie, estúpido



Zbigniew Preisner - Preisner's music


¿Hacen ‘música clásica’ o ‘música culta’ los compositores Philip Glass, Angelo Badalamenti o Ennio Morricone? ¿En qué género encasillamos sus colaboraciones con Lou Reed, Suzanne Vega o Pet Shop Boys? ¿Cuál es la diferencia entre el Kronos Quartet, Matmos, Sakamoto y Oslo Telescopic, por poner sólo cuatro ejemplos? ¿Es más pop la banda sonora de El acorazado Potemkin, de Tennant/Lowe, que sus recientes Fundamental o Concrete, o viceversa?

En este batiburrillo de preguntas y dudas razonables, bien podría encajar en Zbigniew Preisner la consideración de ‘indie’ en la música europea contemporánea. Y su Preisner's Music, recopilatorio en directo de su trabajo con las bandas sonoras de un buen número de películas que nos gustan a (casi) todos, es una excelente iniciación a su obra para quienes aún no conocen a este compositor polaco que se quedó viudo/huérfano el día que murió su marido/hermano Kieslowski. En ese universo del celuloide, donde nos resulta imposible separar lo que vemos de lo que oímos (¿qué le quedaría a El piano de Jane Campion sin el piano de Michael Nyman?), nada habría sido igual en La doble vida de Verónica, la trilogía Azul-Blanco-Rojo o la serie Decálogo sin ese fondo inquietante, emocionante o grandioso de un músico capaz de hacernos dudar sobre lo que fue primero, sobre qué se hizo para qué, sobre quién está al servicio de quién: si la imagen o su entorno sonoro. El momento cumbre de ese cruce de caminos llegó en una escena de Julie (Juliette Binoche) en Azul, pasando con la mirada un solo de piano sobre las notas de una partitura de Preisner.

Sobre Preisner’s Music, el autor dice esto en su web: "No me gusta volver atrás y hacer lo que ya he hecho, pero tenía que saber si mi música ‘sonaba’ como buena sin una película que la acompañase. ¿Sería capaz de mantenerse en pie fuera de su contexto cinematográfico? Para comprobarlo, escogí la mina de sal de Wieliczka, cerca de Cracovia: un lugar secreto, misterioso y mágico a 130 metros bajo tierra. Un ambiente único con una acústica excepcional. El riesgo era grande: una orquesta sinfónica en un subterráneo, conectada a los equipos técnicos de la superficie por 400 metros de cables. Cualquier cosa pudo haber ocurrido. Sin embargo, todo fue increíblemente bien. Separé la música en cinco partes, la elegí de acuerdo con mis gustos y mis instintos, todo unido en una sola 'suite'. Quería producir algo más que un concierto, quería hacer un show musical. El resultado fue un rito, un «mysterium». Mi público y yo sentimos que mi música tiene su propia vida. Lejos de los estudios y las salas de mezclas, me redescubrió el alma de la orquesta y, por primera vez, he oído mi música exactamente como me la imaginaba. Voy a recordar siempre el concierto de Wieliczka como un paso adelante único en la búsqueda de mi libertad artística".

Las composiciones de Preisner no son para amantes de la canícula sonora. Lo suyo es la gravedad, no el sudor, lo mismo que la bachata está hecha para bombear corazones y caderas, pero no para encerrarse en un faro del Círculo Polar y poner un disco de múm. Preisner es para quienes amamos el sonido europeo, sea tecno, dance, pop o cualquiera de sus miles variantes. Para quienes todavía soñamos con ir a Reykjavik. Para quienes hacemos todo lo posible por aprendernos nombres de lugares y palabras sin vocales e imposibles de leer. Al igual que el Balanescu Quartet se pasó un año haciendo de teloneros en la gira de Behaoviur, el viejo y decadente continente están en Song for the Unification of Europe o en Van den Budenmayer. Cierto que no todo y no sólo, pero sobre todo ahí.

Por Manolo Lay

Preisner’s Music, 1995. Orquesta Sinfónica de Varsovia, dirigida por Zdzislaw Szostak. Coro de Cámara de Varsovia, dirigido por Ryszard Zimak. Coro de Niños de la Filarmónica de Cracovia, dirigido por Lidia Halon.
Solistas:
Elzbieta Towarnicka, soprano
Piotr Lykowski, contratenor
Jerzy Glowczewski, saxofón
Wieslaw Kwasny, violín
Konrad Mastylo, piano
Jacek Ostaszewski, flauta

Video de La doble vida de Verónica


miércoles, 5 de marzo de 2008

DIGNO DE ESTAR A 2 METROS BAJO TIERRA

Sia - Some People Have Real Problems
A esta lesbiana australiana la escuché por primera vez en el último episodio de DOS METROS BAJO TIERRA. En los últimos minutos de la mejor serie del universo se veía cómo iban muriendo los infelices protagonistas al ritmo de Breath Me, la mejor canción que Sia ha hecho nunca y con la que la gente la tiene identificada.

Pero estoy empezando por el final. La historia de esta mujer empieza tocando allá en Oceanía en una banda de mala muerte y con peor título aún: Crisp. Como ve que con ellos la cosa no va a ningún sitio, decide soltar amarras y buscarse la vida en solitario. Todavía estaría buscando si una hada madrina llamada Wookie no hubiera hecho un mix de su canción Little Man. Este remix fue tal súper éxito en Reino Unido que la cenicienta de Sia, cual San Pedro, vio entonces la luz: El futuro estaba en la tierra de Diana de Gales. Allí se fue y desde estonces no ha parado de hacer un tipo de discos que podían haber sido hechos por Dido. O a lo mejor no. Pero a mí las 2 me parecen iguales.

Y aunque a nivel de calle, no la conoce ni el tato, Sia ha metido varios goles importantes. Entre ellos, como apuntaba antes, el de colarse en la última y más emocionante escena de SIX FEET UNDER. Otro golpe de suerte fue que Victoria´s Secret, la empresa especializada en lencería sexy, también convirtió Breath Me en su himno, popularizando aún más si cabe esta joya absoluta. Y viendo ella que el medio audiovisual era la lanzadera que ella necesitaba (cosa que gente como Moby sabía desde muchísimo antes), intentó meter una de sus canciones en la (espantosa y rockerísima) banda sonora de la segunda parte de Spiderman. Por alguna cosa legal, no pudo ser. Pero ella no se quedó con las ganas de que su nombre se relacionara con la creación de Stan Lee: En la portada del single aparece disfrazada del hombre araña. Y tan contenta.

Bueno, pues el caso es que acaba de lanzar un nuevo disco (Some People Have Real Problems) y yo me he lanzado a él buscando alguna huella de aquel maravilloso Breath Me. No he encontrado ninguna. Aunque de fácil escucha, te deja frío como un río. Y aunque tampoco llega a ser lo que se dice malo, yo ya me he olvidado de él.
- José Manuel Pozo.


Lo mejor: El último minuto de la canción 11 y, a lo mejor, el hidden track (que no entiendo cómo pudo esconder lo mejor del disco tras la última canción; Una estrategia similar a la de Jesucristo en las bodas de Canaan).
Un consejo: Sia, continúa haciendo versiones como la que hiciste del Gimme More. No es que la versión sea de me tiro por un puente porque ya nada en la vida puede superar esto (de hecho, más bien todo lo contrario) pero, aún así, la senda que conduce a Britney nunca puede ser equivocada.

martes, 4 de marzo de 2008

CHICAS DE HOY EN DÍA

MADONNA - 4 Minutes

El próximo disco de Madonna ‘Hard Candy’ será el último disco de estudio que saque con Warner, así que apostar sobre seguro y recurrir a Timbaland, Pharrel o Justin (muy de moda todos) es una estrategia para despedirse por la puerta grande y vender como churros en USA y en Europa. La gente se rasga las vestiduras y la acusa de venderse, pero chicos, a estas alturas… ¡es Madonna y puede hacer lo que le venga en gana! El tema que ha filtrado una radio francesa, ha corrido como la pólvora, pero Warner lo está quitando de todos los youtubes, así que si quieres escucharla búscala. 4 minutes es un dueto con Justin, es puro Timbaland y puro Madonna al mismo tiempo. Lo mejor de sus beats resucitando el espíritu de la Madonna de los inicios. Directo, bailable, fresco y temazo.

MONICA NARANJO – Europa

Me encanta comentar esta canción porque es el no va más. Nunca me ha interesado Mónica Orange, su música no me dice mucho y su personaje menos (aunque es imposible no haber canturreado Sobreviviré) Tras estar desterrada durante un tiempo por diferentes crisis (personales y con las discográficas) reaparece con un tema imposible, ambicioso y bizarro. Algunos ya lo llaman el Bohemian Rapsody o el Paranoic Android de la Naranajo, y es una mezcla límite entre Rocio Jurado, Raphael, Mina, Prodigy, Chemical Brothers, El Fantasma de la Opera, Drácula, Manuela Trasobares, un musical travesti y una opera gótica. En el límite del testimonio decadente de una diva acabada y de una obra maestra, recomiendo escuchar esta maravilla mientas se sigue la letra (o no la entenderás nunca):

JANET JACKSON – Feedback

Otra que lo mismo me da que me da lo mismo. Vuelve con un single que le debe mucho al Blackout de mi Britney, pero sin demasiada chicha. La canción tiene algunas cosas que sí y otras que no. En contra, que es difícil de recordar y tararear, que no veo una canción clara y que esto como primer single no dice mucho. A favor, que tiene algún sonidillo chulo y que se puede bailotear haciendo coreografías chorras (al estilo de Fama, a bailar) El videoclip es muy chunguerío, típico Janet con sus indumentarias imposibles y sus bailes entre leche y cereales (?):

ANNIE – Your girlfriend hates me

Ayer mismo, en el myspace de Annie, colgaron una canción de su nuevo disco. Y hoy mismo la canción ya ha desaparecido. Pero tranquilos, que seguro que alguien la capturó o la vuelven a poner. La letra va relaciones que se rompen, de echar cosas en cara y de acabar cantando un ring-ding-ding como quien no quiere la cosa. Más cercano a Chewing Gum que a Crush, es un puro pastel delicioso sin trampa ni cartón.

Davis

lunes, 3 de marzo de 2008

MI AMIGA GOO

SONIC YOUTH - GOO

Ya sé que la mayoría de los lectores de este blog esperan una disertación documentada sobre las conexiones indirectas que, a modo de red neuronal, relacionan a creadores de muy distinto pelaje de forma casi fantasmagórica. Y lo cierto es que una investigación paciente y un escrutinio obsesivo podrían llevar a cuestionarnos, por ejemplo, si Jon Thor Birgisson, cantante y guitarrista de Sigur Rós, y el mismísimo Michael Jackson son la misma persona. Pero el domingo siempre ha sido un día difícil para la crítica musical, sobre todo si cierra un puente vacacional y las neuronas del que escribe están más cansadas de lo habitual. Dicho esto, lo mejor es apostar sobre seguro y recordar brevemente las excelencias de Goo (Geffen, 1990), uno de los mejores discos de Sonic Youth.

Debió de resultar difícil generar nuevo material tras la edición de un disco que hoy en día se considera uno de los pilares del indierock más ruidoso y experimental; nos referimos al mitificado Daydream Nation (1988). Pero los chicos de Sonic Youth vivían entonces en momento de gracia creativa y nos obsequiaron, dos años más tarde, con un trabajo verdaderamente notable. Quizás Goo sea un disco más accesible que su predecesor y podría decirse que allana el camino hacia la bomba pop-grunge que supuso el siguiente y exitoso trabajo de la banda (Dirty, 1992). Pero no se engañen, en Goo podemos encontrar muchos de los elementos que caracterizan el sonido “marca de la casa”: acoples prolongados, guitarras y bajos distorsionados hasta la pérdida de conocimiento, sinuosas variaciones rítmicas en las baterías, giros atonales que rozan el dodecafonismo, estructuras irregulares y, por supuesto, momentos melódicos con gran gancho pop.

El LP comienza de forma arrolladora con la popular “Dirty Boots” y, como suele ser habitual cuando la voz de Kim Gordon da el relevo a la de Thurston Moore, la cosa se torna más áspera en la ruidosa, e inquietante por momentos, “Tunic (Song for Karen)”, la segunda canción del álbum (dedicada a Karen Carpenter). Tras el guiño punk de "Mary-Christ", llega el momento del single “Kool Thing”, bomba salvaje, bailona y pseudofrívola que cuenta con la bizarra colaboración del inefable Chuck D (Public Enemy). El disco difumina cualquier olor a mainstream con el duelo noise de “Mote” (el turno cantor de Lee Ranaldo), quizás la canción más experimental del disco, y complementa la crudeza punk de “My Friend Goo” y “Mildred Pierce” con la desconcertante y escabrosa melancolía rock de "Disappearer" y "Cinderella's Big Score". Tras el anecdótico interludio de “Scooter & Jinx”, la colección se cierra con “Titanium Exposé”, epílogo poderoso y polirrítmico que resume buena parte de las sensaciones sónicas que despierta Goo.

En 1991 fue editada una versión visual de Goo, incluyendo, según el caso, un vídeo-clip, vídeo-creación o vídeo-delirio altamente casero para cada una de las canciones que componen la edición original. Todos estos vídeos fueron incluidos en la reciente recopilación Corporate Ghost. The Videos: 1990-2002 (Geffen-UMG, 2004). Les recomendamos con vehemencia el visionado completo y compulsivo de estos dos vídeoclips:

DIRTY BOOTS. Resulta extremadamente tierno recordar este maravilloso gazpacho de amor bolo-juvenil, camisas de cuadros, grasa capilar y bailoteo de salto y empujón. No se lo pierdan por nada.



KOOL THING. Material altamente recomendable para quien quiera formar una banda de rock o levantar los vuelos de un proyecto marchito. Toda una orgía incontenible de poses, gestos, actitudes contundentes y calentura escénica que, convenientemente aderezada con un vestuario repleto de boas emplumadas, piel sintética y tejidos plastificados, nos muestra lo necesario para ser una estrella del rock alternativo y pisotear a quien se ponga por delante (lutier dixit).



Por La Gloria de la Puerta Real