lunes, 17 de diciembre de 2007

Abajo las pantallas


Mates of State - Bring it Back


Gracias a mi pequeño ipod shuffle pude descubrir este fantástico grupo. Todo comenzó con una de esas entradas masiva de mp3 en el disco duro que uno hace cuando se cansa de escuchar siempre los mismos discos. La mayoría de ellos son carne de papelera de reciclaje después de un par de escuchas. Por puro azar Bring it Back, que así se llama este lp, se coló en mi ipod. Es un ipod muy objetivo con la música ya que no tiene pantalla, y si lo llenas de música desconocida nunca sabrás lo que escuchas, por ello lo oirás desde una perspectiva más abierta. Al grano, las canciones de Mates of State fueron apareciendo en él en diferentes lugares y horas hasta que de repente me descubrí tarareando una melodía de voz, unos coros perfectos o una frase musical que se repetía constante en mi cabeza. Así fui corriendo a casa, conecté el maldito ipod y fui buscando canción a canción de qué grupo se trataba: Mates of State. Nunca antes oído. Ni puñetera idea, pero qué importaba, me gustaban y mucho. Unas melodías vocales llenas de originalidad y frescura, redondas, sin vacilaciones. Perfecta compenetración entre esas líneas de poderosos órganos con baterías geniales. Estos chicos sabían perfectamente lo que querían transmitir y cómo hacerlo. Imaginé un grupo de chicas y algún que otro chico con varios teclados, bajo y batería. Mi sorpresa fue el descubrir que lo formaban dos personas: Kori Gardner (órganos y voz) y Jason Hammel (batería y voz).


Formaron el grupo en 1997, tras varios singles sacaron su primer disco My Solo Project en el 2000 con Omnibus records, después de mudarse desde Kansas a San Francisco. Le siguieron Our Constant Concern en 2002 y Team Boo en 2003 con Polyvinyl records. En 2006 editaron el disco Bring It Back, su mejor trabajo hasta la fecha. Basan su filosofía en el lema ‘play anywhere, anytime’, y sus directos vienen a ser espectáculos donde se crea gran interactividad entre banda y público. Pero sin duda su gran poder de atracción procede de la excelente compenetración entre Kori y Jason, casados en 2001, que se refleja perfectamente en unas melodías vocales llenas de luz, de sabor a nuevo, de esas que te hacen cantar y acabar la canción con una sonrisa en la cara, como en esa pedazo de tema que es Running out. Enormes también esos teclados minimalistas, sencillos y concisos enlazados con ritmos que definen los tiempos de cada canción, creando entre los dos unas originales estructuras muy poco apreciadas en el panorama pop actual. Se explica que el New York Times escribiera sobre su primer trabajo como ‘uno de los mejores discos que probablemente no escuchaste durante el 2000’. Otro punto a favor son sus cuidados videos, no perderse Fraud in the 80s, el primer single de este disco y Like U Crazy. Y si buscas algo más podrás verlos en un programa de tv formando parte de un coro para la cantante Feist junto a miembros de Broken Social Scene, the New Pornographers, The National y gente de Grizzly Bear.

Ipod no ha pagado ni un duro por este post.

Por Santeuil

Lo mejor: la frescura que desprende
Lo peor: la portada

1 comentario:

Unknown dijo...

este fue uno de mis discos preferidos de 2006, me encantan!!!