sábado, 2 de febrero de 2008

Guille ‘comisuras sangrantes’



La Casa Azul – La revolución sexual

¡Ay qué nervios! ¡Qué responsabilidad tan grande hacer la crítica del último disco de La Casa Azul! Con la cantidad de fanes que tiene y yo que no escuchaba algo así desde Al amanecer de los Fresones. Pero había que hacerlo, ya que nadie se ha atrevido a darle cobertura en la Dusty aquí estoy yo para enfrentarme a esta explosión de canciones pop.

Había escuchado el single La revolución sexual y, aunque las primeras veces no me entraba, ahora me tiene enganchado. Eso sí, para mi gusto tiene una gran ”supercagada” y no es otra que ese puente casi al final de la canción y que ¡por el amor de Dios! No sube como debe hacerlo tratándose de una canción de baile. Nada es perfecto es este mundo. Pero en esta revolución sexual hay muchas más cosas que un single, hay toda una serie de temitas y temazos (parodiando a mi querida Stereofan) que te impiden dejar de saltar, bailar y, sobre todo, de sonreír hasta que tus comisuras sangren.

Hablar de La Casa Azul es hacerlo de Guille Mililkyway, y hacerlo de Guille es hablar de una gran multitud de referencias e influencias musicales, todas ella apreciables en su música de un mayor o menor modo. Si bien en sus canciones anteriores predominaba el bubblegum y el eurodisco, aquí el abanico se hace mayor. Desde Helen Love a Jean Jaques Perry, pasando por los Housemartins o Pizzicato Five (el sonido japo está muy presente en el disco, el título en japonés de la portada es un simple adelanto de lo que puedes encontrar dentro).

Hay canciones que te recuerdan (en exceso) a algunas composiciones anteriores, hay canciones donde ya no se le puede poner más efectos a la voz (de poner más ya no se escucharía voz, sólo sería el pitido de un grillo), las letras son ñoñas (que no graciosas, esto no es L-Kan) y para alguien como yo que vive a tantos miles de kilómetros de Japón, el culto a la (no) cultura japonesa me resulta un tanto estúpido y creo que nunca conseguiré pillarle el chiste. Hasta aquí lo malo o mejorable del disco… porque fuera de esto, La revolución sexual te engancha, te sube el ánimo y te hace ver el mundo con un poco más de color, y eso se siempre se agradece.

Por Dindan

Lo grande: La revolución sexual, El momento más feliz, No más Myolastán y Esta noche solo cantan para mí.
Lo mejor: ¡es un disco superdivertido!
Lo peor: lo ya expuesto anteriormente y por encima de todo algunas cosas de sus fanes.

Su Myspace
El vídeo de
La revolución sexual
Myspace de Eurovision (para la edición de este año se hará una primera selección entre todos los grupos que presenten sus temas en Myspace. La Casa Azul participa así que votad).

4 comentarios:

Madidi dijo...

estoy superdeacuerdo contigo, shibuya ya ha tenido su momento.
yo en vez de myolastan pido "japo style" es lo que menos me gusta del disco.
estoy hecha una nazi como podrás comprobar.
que las letras sean ñoñas es comprensible. ya se liberó de toda la rabia contenida en sus anteriores canciones y ahora todo es amor. eso no tiene porqué ser malo.
pero parece que la música tiene que ser desgarradadora y las letras deprimentes para que te tomen en serio en este mundo.

Anónimo dijo...

A mí también ha emezado a gustarme más la canción después de oírla varias veces...(me refiero a "la revolución sexual").
Y otra cosa: no encuentro la representación de La Casa Azul en eurovisión! ¿Se ha inscrito Guille con otro nombre?

Anónimo dijo...

¿entonces nos gusta el disco de la casa azul o no? yo he empezado a escucharlo tarde, hace un par de semanas, y después de que gente de mi entorno, que nunca había escuchado este tipo de música, ni sabían de dónde venía la casa azul, hablaran maravillas del disco. La cuestión es que tiene algunos temas que me han enganchado pero no sé si con eso basta... de todas formas, pienso votarles para eurovisión of course!

El portero dijo...

Este disco ha sido mi gran descubrimiento del año 2007. No tenía ni idea de la existencia de La Casa Azul y también accedí a ellos a través de La Revolución Sexual. Es un antidepresivo infalible, lo oyes por la mañana y te sube, aunque cuando ya lo has triturado tanto como yo su ritmo cansa. Mi favorita es Chicos Malos, me identifico mucho con ella.